El panorama se complica para Rayados de Monterrey previo a los cuartos de final de la Liguilla. La escuadra regia se verá obligada a enfrentar a Pumas sin dos de sus piezas clave: Lucas Ocampos y Jordi Cortizo.
La expulsión de Ocampos en el partido contra León, que le acarrea una suspensión de dos partidos, es un duro golpe para el ataque de Rayados. El argentino ha sido fundamental en el esquema de Demichelis, aportando desborde, visión de juego y goles. Su ausencia deja un vacío importante en el once inicial y obliga al técnico a replantear su estrategia ofensiva.
Por si fuera poco, la lesión de Jordi Cortizo agrava aún más la situación. El mediocampista mexicano, pieza clave en la generación de juego, se perderá el resto de la Liguilla debido a una lesión. Su ausencia se suma a la de Ocampos, dejando a Monterrey con dos bajas sensibles en el mediocampo.
La Liguilla es una competencia donde cada detalle cuenta, y la ausencia de jugadores de la talla de Ocampos y Cortizo puede marcar una gran diferencia. Pumas, un rival siempre complicado, aprovechará estas bajas para buscar sorprender a Rayados en su casa.
El técnico de Monterrey deberá encontrar las soluciones adecuadas para suplir a estos dos jugadores y armar un equipo competitivo para enfrentar esta serie. La afición rayada, por su parte, espera que el equipo pueda sobreponerse a estas adversidades y avanzar a las siguientes rondas.
Sin duda, Rayados llega a los cuartos de final con un panorama complicado. Las bajas de Ocampos y Cortizo son un duro golpe, pero el equipo tiene la calidad y la experiencia necesaria para superar este momento difícil y seguir luchando por el título.
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