¿Lo están encubriendo? Lo que haría América para evitar que Malagón se pierda la final vs Rayados

Al término del encuentro entre cruz azul y América por las semifinales en las cuales el equipo de Coapa terminó derrotando a los cementeros, se presentaron imágenes del portero americanista Luis Ángel Malagón, abandonando el terreno de juego en el carrito de las desgracias con el cuello, totalmente inmovilizado y con oxígeno, pero parece ser que los del nido están tratando de verle la cara a la Liga MX pues en la conferencia de prensa el técnico André Jardine aseguro que solamente se le bajó la presión por las emociones del partido, sin embargo, esto sería para ocultarlo de la regla del protocolo de conmociones.

Hay que recordar que en el pasado el América pidió que no dejaran jugar a Duvan Vergara en una final de Concachampions justamente por el protocolo de conmociones por el cual debe de estar por lo menos 8 días fuera supuestamente por protección, a sabiendas de esta regla dijeron que Malagón solamente había tenido un bajón en la presión para que Monterrey no pueda apelar que fue una conmoción y que debería de estar fuera en la final del fútbol mexicano.

El triunfo del Club América ante Cruz Azul se vio opacado por la preocupante situación de su guardameta, Luis Ángel Malagón. Tras el partido, el técnico André Jardine habría declarado que al arquero se le bajó la presión arterial, insinuando que este fue el motivo de su malestar. Sin embargo, esta versión ha generado polémica y dudas entre los aficionados y expertos, quienes cuestionan si estas declaraciones podrían haber servido para evitar la aplicación del protocolo de conmoción cerebral.

El protocolo de conmoción cerebral es un conjunto de normas establecidas para evaluar y tratar a los jugadores que sufren un traumatismo craneoencefálico durante un partido. En caso de sospecha de conmoción, el jugador debe ser retirado del campo y sometido a una evaluación médica exhaustiva. Si se confirma la lesión, el jugador debe permanecer en reposo y seguir un proceso de rehabilitación antes de volver a competir.

Las declaraciones de Jardine han desatado un intenso debate en las redes sociales y en los medios deportivos. Algunos expertos señalan que la baja presión arterial podría ser un síntoma de una conmoción cerebral, mientras que otros consideran que ambas condiciones son independientes.

Por su parte, los aficionados del América se muestran preocupados por la salud de Malagón y exigen una investigación exhaustiva para determinar si se siguieron los protocolos adecuados.

El Club América aún no se ha pronunciado oficialmente sobre este tema, lo que ha aumentado la incertidumbre. Se espera que en las próximas horas se emita un comunicado aclarando la situación y brindando más detalles sobre el estado de salud de Malagón.